Los riesgos de ciberseguridad van al alza, especialmente cuando se trata de empresas que trabajan con datos. La gestión de identidad y acceso (IAM) puede ayudarle.
A todo el mundo le viene bien tener a alguien con quien contar. Cuando se trata de proteger los datos de toda una empresa, sea grande o pequeña, no hay mucho que podamos hacer nosotros solos. Por fortuna, al tiempo que aumentan las amenazas sobre ciberseguridad, también se vuelven mejores las herramientas para combatir riesgos.
La gestión de acceso e identidad (IAM por sus siglas en inglés) es una herramienta diseñada ex profeso para ayudar a las empresas que trabajan con datos a proteger su información. La IAM puede encargarse de las tareas de seguridad tediosas y liberar tiempo de los administradores de TI. A menudo, los riesgos para la seguridad en las empresas se derivan de la falta de herramientas que simplifiquen las medidas de seguridad. Los trabajadores tienen una cantidad limitada de tiempo en la que participar o fomentar una cultura de seguridad día a día. Por eso la automatización mediante IAM es clave.
La IAM puede dar permisos a los trabajadores automáticamente, ofrecer credenciales y proporcionar inicio de sesión único (SSO) para varias cuentas. En la práctica, todo esto le facilita la vida a los trabajadores de toda la empresa.
Aunque las ventajas de la IAM puedan dar la vuelta a cómo funcionan muchas empresas, es una herramienta que necesita una implementación cuidadosa en la estrategia general de seguridad. Implementar la IAM es una iniciativa continua que debe combinar un conocimiento actualizado de las tecnologías de IAM con una intrincada planificación y experiencia en la gestión de cambios.
Implementar la IAM presenta sus propios retos y muchas pequeñas y medianas empresas (pymes) carecen de los recursos necesarios para llevarlo a cabo. Por ello, a menudo las pymes se quedan por detrás de las empresas más grandes en la implementación de la IAM. Este desfase no se le ha escapado a los piratas informáticos que están desarrollando nuevas amenazas dirigidas a empresas más pequeñas. Al implementar la IAM, es importante tener en cuenta los siguientes puntos clave:
Puesto que las credenciales de sesión son uno de los tipos de datos más buscados, una forma de adelantarse a las filtraciones de credenciales es implementar un gestor de contraseñas. Sin embargo, muchas organizaciones se saltan este paso crucial: solo el 25 % de los encuestados por Dashlane dijeron que utilizan una solución de gestión de contraseñas automatizada para realizar un seguimiento de las contraseñas de sus cuentas de trabajo.
La IAM puede ayudar a las empresas a proteger sus datos señalando los huecos en su seguridad, implementando cambios automáticamente y gestionando la actividad de los usuarios. La IAM permite que los empleados tomen el control de sus datos y accedan fácilmente a la información que necesiten cuando y donde la necesiten.
Lea nuestro documento Identity and Access Management 101 para saber más.